Claro que no, ni vos misma tendrías las maneras indicadas de razonar con los acontecimientos, de como fue que todo fue saliendo a flote, como un simple aquí estoy y mucho gusto, que no sé como explicar la historia y menos los eventos pasados y sin embargo, como bien recordaras ahí estaba yo conjugando el pretérito y balbuceando no sé que sandeces de cartas de amor de eventualidades que como no te imaginaras, no vienen siquiera al caso, y todo fue que vos fueses sonriendo como si me siguieras la línea de cada argumento, mientras yo disimulaba encontrar tus zapatos con la mirada, para que no notaras que miraba